Con el aliento de sus fanáticos, Marcos Maidana arribó a Las Vegas con el estilo que exige esa ciudad. Lejos de los gimnasios de Santa Fe y de los alfajores que lo patrocinaban, el "Chino" llegó a la tierra del juego con una limusina dorada, saco blanco, camisa rosa y gafas oscuras.
Con el porte de una estrella de Hollywood, el argentino recibió el cariño de sus seguidores, a los que les firmó varios autógrafos y sonrió para las cámaras. "Quiero agradecer el apoyo de todos los latinos, la victoria se la voy a dedicar a ellos y a los filipinos, porque acá no los quieren", dijo el boxeador.
Y pegue, y pegue, y pegue Chino pegue fue la respuesta de sus fans, quienes escucharon a su ídolo prometer el triunfo: "Vengo a terminar el trabajo que empecé, tengo doce rounds para definir la pelea, porque Mayweather no es lo que parece". El sábado por la noche el santafesino tendrá su revancha ante "Money".
Fuente: Infobae.