Hace alrededor de 30 años que es Profesor de Educación Física. Juan Carlos Rossetti participó en la formación de las primeras colonias de vacaciones municipales y en toda esa acción descubrió que una necesidad para la comunidad, hace 25 años atrás, era contar con un complejo privado que asegurara la diversión, el entretenimiento y la posibilidad de una colonia de vacaciones para niños y adolescentes.
Diagramando en un papel en su casa lo que después sería la pileta, así nació este complejo que este año, en diciembre, habrá de celebrar 25 años de sus inicios, hoy con más servicios, como espacios cubiertos para disfrutar también en días de lluvia, y con un salón de fiestas para la celebración de cumpleaños y reuniones.
Cuenta que cuando empezó con esta propuesta los concurrentes eran adolescentes de entre 10 y 14, 15 años. Los niños de 5, 6 años eran casi una rareza. Hoy los concurrentes son sobre todo niños pequeños, porque sus padres tienen la seguridad que están bien cuidados, compartiendo entre pares y disfrutando en tiempo de verano de las enseñanzas de las primeras técnicas de natación y de juegos recreativos dentro y fuera del agua.
Entre sus muchas anécdotas recuerda a un niño cuya madre advirtió que no le gustaba para nada el agua. Así que el pequeño permanecía buena parte de la tarde sentadito, alejado de la pileta. Cada tanto el Profesor Rossetti se le acercaba, balde en mano, y le mojaba despaciosamente la cabecita. Así estuvieron toda la temporada. Para el año siguiente el niño había tomado confianza, “y era casi igual a Meolans en el agua, había perdido el miedo”.
Complejo Recreativo “El Mono”, donde muchos niños, a lo largo de 25 años, han disfrutado de una colonia de vacaciones, cuidados y divertidos.