El número 13 proviene de los 13 dioses creadores del hombre, así como los 13 demonios que habitaban el infierno maya o el inframundo, es por ello que este calendario era sagrado, pues relacionaba a sus 13 dioses creadores y sus demonios.
“Recree los 13 seres protectores a la manera de cada uno de sus dioses o figuras mitológicas, ya que cada una de estos protectores o guerreros estelares me transportaban no sólo a civilizaciones terrenas sino también interdimensionales”.
Formando una tropilla o ejercito estelar que llevada al plano terrenal representa el enlace entre el cielo y la tierra, plasmando de este modo las nuevas conciencias.
Este ejército de 130 guerreros estelares es guardián de la obra original, que se encuentra a modo de altar, que lo contiene, en un universo negro.
Custodiando la conciencia de distintos tiempos.