Este año por la ola de frío que se inicio tras vientos y lluvias la Parroquia San José Obrero del Pueblo San José llevó a cabo el domingo la concentración popular en el interior del templo evitando la bendición sobre la explanada al aire libre que moviliza a los vecinos donde el Sacerdote brinda una serie de reflexiones, rescatando la mayor celebración que impacta fuertemente en la vida católica de cada uno de sus componentes.
Con toda emoción los vecinos levantan sus ramos mientras el Padre Diego Schmidt procede a la bendición, recorriendo todo el templo para presidir la santa misa del Domingo de Ramos y deja en su Homilía expresivas consideraciones, haciendo hincapié en que el Domingo de Ramos fue el cumplimiento de la profecía de los “setenta sietes“ del Profeta Daniel: “Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe habrá siete semanas y sesenta y dos semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos" (Daniel 9:25). Juan 1:11 nos dice: "A lo suyo vino [Jesús], y los suyos no le recibieron." Las mismas multitudes que gritaban: “¡Hosanna!” gritaban "¡Sea crucificado!" cinco días más tarde.
El Sacerdote, tras la consagración, invita a la mesa del Señor para compartir la Santa Eucaristía y a partir de entonces comienza la sentida Semana Santa que concluirá con la resurrección de nuestro Señor Jesucristo.