El viernes por la mañana, luego de regresar de la zona serrana, concluidas 24 horas de trabajo prácticamente ininterrumpidos, regresado a Coronel Suárez todo el grupo por la Agrupación 4X4 que está colaborando frente a este siniestro y al haber recibido el relevo de un nuevo grupo de Bomberos, La Nueva Radio Suárez entrevistó a Marcelo Sonzini, 2° Jefe del Cuartel de Coronel Suárez.
Reconoció que el siniestro “estuvo complicado desde que arrancó, sobre todo por efecto del viento y si tomamos en cuenta que estamos sobre terreno muy quebrado, de difícil llegada”.
Informó que el grupo que comandaba había estado trabajando en todo momento en la zona de la estancia Lolen, procurando que el fuego no alcance el casco de la estancia. Contaron con la colaboración del avión de Aguer, que tiraba desde el aire lo que los Bomberos llaman “baldazos” de agua, consistentes en 2.000 litros que iban en el tanque que habitualmente se usa con productos para fumigar, con la dificultad que según la intensidad del viento hubo viajes en que el agua no llegaba a los focos que pretendían los Bomberos que estaban en tierra y que después terminaban de apagar a latigazos.
Ratificó que “la prioridad es proteger los lugares donde hay casas, puestos o los cascos de las estancias”, e indicó que hasta el momento en Lolen no afectó zonas sembradas, ni rastrojos, pero habiéndose presentados frentes de fuego de hasta 300 y 400 metros.
También informó que para la mañana del viernes, además de cuidar la zona de Lolen, se estaba protegiendo otro establecimiento agropecuario, La Serrana.
Recordó que “el peor enemigo nuestro –de los hombres que trabajan conteniendo el fuego- es el humo, por lo que en forma permanente hay que estar muy atentos a la salida de escape que podemos llegar a tener en caso que se de vuelta el viento, cosa que sucede reiteradamente”.
Finalizó la nota diciendo que “estamos esperando el milagro de la lluvia, mientras tanto tenemos que seguir poniendo el cuerpo, en relevos cada 24 horas, con la gente ya agotada, que no alcanza a reponerse, debido a que muchos, al regresar, tienen que retornar a sus trabajos y cumplir con sus obligaciones personales y laborales. Esto es muy agotador, pero lo vamos llevando adelante, porque esta es nuestra tarea como Bomberos Voluntarios”.