El intendente de Coronel Pringles, Carlos Oreste, de extracción radical y flamante incorporación del Frente Renovador, afrontará un complicado escenario en los próximos dos años frente a un Concejo Deliberante adverso en el que no tendrá concejales propios, y en el que además rivaliza con el otro espacio massista local.
“La noticia la tomamos casi como una traición porque no respeta la voluntad popular. El pueblo lo votó como intendente de la Unión Cívica Radical. Es una decisión inconsulta de la noche a la mañana”, afirmó el presidente del bloque radical, Rubén Streintenberger.
Mediante un comunicado, el radicalismo rechazó el pase de Oreste al Frente Renovador, cuya noticia se divulgó el fin de semana a partir del tweet de su padrino político, el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
“Por unanimidad, la mesa directiva de nuestro comité local, también la totalidad de los concejales y representantes del partido a nivel local, como los distintos lineamientos internos del radicalismo; así como también el legislador provincial del partido, dejan expresa constancia de no aprobar dicho comportamiento, ya que se aparta de los mandatos oportunamente otorgados por nuestros electores dentro del marco partidario”, apunta el comunicado de la UCR local.
En consecuencia, el margen de maniobra de Oreste en el Concejo Deliberante puede verse seriamente afectado. De los cinco concejales radicales en ejercicio, cuatro firmaron la resolución, y según la mesa del partido, el edil restante, Jorge Stanga, comparte el espíritu del comunicado, pero estaba fuera del distrito al momento de su elaboración.
Así, en un Concejo Deliberante de 14 miembros, el jefe comunal puede quedarse con una escasa representación o incluso sin ella, tras la renovación de diciembre, momento en el que asumirán dos concejales por el Frente Progresista Cívico y Social, dos por el Frente para la Victoria, y cuatro por Compromiso Pringles, el vecinalismo referenciado en Sergio Massa.
La renovación es el resultado de la derrota de Oreste en los últimos comicios. Como en 2009, Compromiso Pringles se adjudicó en octubre la victoria a nivel local con el 39,18%, muy por arriba del Frente para la Victoria que tuvo el 24,80%, y seguido de cerca por el Frente Progresista con el 22,86%.
De cara a los próximos dos años, el Concejo quedará conformado por 5 concejales de Compromiso Pringles, 5 de la UCR, y 4 del Frente para la Victoria, un escenario en sí mismo adverso para Oreste, y aún peor si el radicalismo se posiciona junto al resto de la oposición.
“Estamos defraudados y desilusionados. Después de 18 años en los que la Unión Cívica Radical gobernó el distrito, la comuna se pierde a mitad de mandato y no en las urnas. Es algo increíble”, consignó Streintenberger.
Por su parte, Compromiso Pringles ya anunció que se mantendrá en la oposición a nivel local. Su líder, Lisandro Matzkin, ex candidato a diputado provincial por el Frente Renovador, aseguró que reconoce el liderazgo de Sergio Massa y acompaña su proyecto político, aunque “no comparte espacio a nivel distrital” con Oreste.
“Vamos a seguir siendo la oposición; estamos en veredas opuestas. No cambia nada. No compartimos en nada la gestión de Oreste para el distrito, que tiene una de las tasas más altas en desocupación y sólo se ha limitado a pagar sueldos”, apuntó.
Cabe señalar que durante las elecciones, el propio Oreste reconocía su inminente pase al Frente Renovador en reuniones privadas, algo que el protocolo no recomendaba, dado que competía por el Frente Progresista. El hecho se suma a la declaración de "huésped de honor" que le otorgó a Massa durante la campaña y parece vincularse con el presunto reparto de boletas cortadas: la del oficialismo local junto a la de diputados nacionales del Frente Renovador.
El desfavorable escenario para el ahora massista intendente de Pringles impacta sobre la gobernabilidad, una preocupación central para los jefes comunales que, en general, buscan no quedar por debajo de los dos tercios de ediles, una composición opositora necesaria para avanzar en juicio político, o incluso en una destitución.