Lofvall le ofreció volver a solicitar el beneficio del arresto domiciliario con la chance de que la justicia en esta oportunidad se la otorgue, teniendo en cuenta que la investigación ya concluyó y ya no existe riesgo alguno de que pudiera entorpecer la tarea del fiscal.
Sin embargo, para sorpresa del propio letrado, Heit le respondió que prefería continuar esperando el juicio oral y público en la misma celda que ocupa desde noviembre de 2012 para poder recibir como hasta ahora las visitas de su novio, también alojado en la UP4. La periodista también argumentó que en caso de recibir esa morigeración de la prisión preventiva, le sería muy difícil compartir el mismo techo con su madre, con quien mantiene una muy mala relación desde hace años.
"Pensé que se iba a poner contenta, pero me encontré con una respuesta sorpresiva. Me dijo que prefería seguir viendo a Olivera tres veces por semana en las visitas que ambos tiene dentro de la cárcel, antes que ir a vivir a la casa con su madre", dijo Lofvall.
En agosto de este año, la Jueza de Garantías Gilda Stemphelet autorizó el traslado de Olivera del Penal de Saavedra hacia Bahía Blanca, para que el falso pastor pudiera mantener un contacto más cercano con Heit. Desde entonces ambos aprovechan cada encuentro para fortalecer su relación, a la espera del debate oral y público que podría tener fecha para los primeros meses de 2014.
Estefanía Heit está acusada de los delitos de reducción a la servidumbre, estafas reiteradas y lesiones, en perjuicio de Sonia Molina, imputaciones que comparte con su marido, Jesús Olivera, a quien también se lo sindica como autor de abuso sexual en perjuicio de la misma víctima.
El caso, que tuvo un amplia repercusión en los medio nacionales, saltó a la luz el lunes 12 de noviembre de 2012, cuando Molina, oriunda de Río Colorado, se presentó en la casa de una familia suarense donde había trabajado anteriormente, y aseguró que estuvo cautiva durante tres meses en la casa de la pareja, donde la habían maltratado y sometido a todo tipo de vejámenes.
Fuente: La Brújula 24.