Quien fuera hasta hace poco Presidente de la Unión Industrial Argentina, Ignacio De Mendiguren, es candidato a Diputado Nacional por el Frente Renovador y acompañó la delegación en el marco de la campaña política de cara a las Elecciones Generales del 27 de octubre, visitando la ciudad de Coronel Suárez.
Indicó que “estuvo cercano a la Presidenta, no al Kirchnerismo. Soy desarrollista de toda la vida, pero como Presidente de la UIA tuve una muy buena relación con la Presidenta, de respeto mutuo, hemos conseguido muchas cosas para la Unión Industrial. Espero seguir teniéndola, porque un legislador, aunque no sea del oficialismo, en cualquier país civilizado tiene diálogo con su Presidente”.
Explicó que “hay cosas que no comparto con el Gobierno: este tema del blanco-negro; amigo-enemigo; si estás 100 por ciento conmigo estás, si no sos destituyente, son temas que no comparto”.
Se definió como “un obsesivo del diálogo social, del diálogo tripartito entre trabajadores, empresarios y el Gobierno. Esto lo tuvo como bandera la actual Presidente en la campaña 2007, pero luego dejó de hacerlo. En este espacio lo que mas promovemos es ese diálogo: aquí está la CGT, la industria, el campo; ese es el modelo nuestro hacia el futuro”.
Indicó que “la industria ha crecido, aunque esperábamos mayor crecimiento; Brasil no está comprando la cantidad de automóviles que Argentina le estaba vendiendo antes, pero estamos saliendo de un año difícil, vamos a tener un crecimiento que esperamos llegue al 2,5 %”.
Agregó que “creo que corremos un riesgo si no corregimos las cosas que hay que corregir, volvamos a aquellas políticas pendulares de industrialización, luego desindustrialización. Desde el piso de la crisis Argentina creció en su industria más de un 100 por ciento, pero luego del 2008, 2009 empezamos a tener dificultades. Esos motores que nos habían llevado a crecer, tipo de cambio competitivo, baja inflación, superávit fiscal y comercial, se fueron apagando y en vez de serenarnos y tratar de ponernos en marcha lo negamos. Por eso ahora hay que apurarse para que esos motores no se terminen de apagar”.