La profesional, al ser consultada por La Nueva Radio Suárez, agregó que “es cierto que hay que comer de todo, variado, la alimentación tiene que contar con frutas, verduras, carnes, cereales, derivados, grasas como aceites, pero cada uno en su combinación justa y necesaria para prevenir enfermedades y, a su vez, se atienden problemáticas específicas como diabetes por ejemplo; así se logra controlar mejor los niveles de glucemia, entre otros casos”.
Maria Julia Rossetti explicó que “es sumamente importante evitar combinar las proteínas de las carnes con los hidratos de carbonos de harinas, pastas; no porque engorde más o menos, sino porque de por sí son ambos alimentos muy calóricos, pero además la combinación hace que se necesite mayor acidez en el aparato digestivo, lo que la torna en una comida muy pesada, no se digiere fácilmente”.
Luego apunta respecto a las personas diabéticas, donde es importante que se combine las harinas, las pastas, con los vegetales crudos o cocidos, y para el resto de las personas también calificando que “la fibra de los vegetales combinada con los hidratos de carbono evita que las glucemias se eleven abruptamente”.
Explicó la profesional consultada que los vegetales deben incorporarse crudos o cocidos en combinación con carnes y pastas y es mejor evitar el consumo repetido de pastas con las proteínas de la carne. Así se hace una mejor digestión, se activa más el metabolismo, menos consumo de calorías por comida, se evita la típica somnolencia cuando toda la energía está dedicada en hacer la digestión, se evita engordar”.
Sobre la papa indicó que es un hidrato de carbono complejo como las harinas. Por lo que recomendó usar el puré de papa con pescado o pollo y si se consumen papas fritas evitar combinarlo con carne, antes mejor con ensalada, por la misma causa apuntada anteriormente.
La recomendación para las papas fritas es que se hagan en casa, que sea con aceite de buena calidad y usado por única vez, con la papa cortada grande y hecha en aceite bien caliente.
Sobre el uso de la sal, consideró que es un adicional innecesario, por un lado porque todos los alimentos tienen naturalmente sodio; en el caso de las conservas y fiambres tienen mucha sal, por lo que la recomendación es limitar su consumo.
Y para aquellos que no puedan prescindir de la sal, explicó que las sales marinas no están libres de sodio como se cree, para ello hay que buscar en el mercado las sales en cuyo envase se indica específicamente que tienen un porcentaje menor de sodio.