La Nueva Radio Suárez habló con la Inspectora del nivel secundario, donde Marcela Zaffora abordó algunas cuestiones referidas a la segunda y última etapa del ciclo escolar 2013.
“Me duelen particularmente los comentarios que indican que ‘en la educación está todo mal’, porque en las escuelas, desde los directivos, docentes y todo el personal, siempre se hace todo lo posible y más para tratar que la escuela continúe con su objetivo de educar sistemáticamente. Con los diseños curriculares –que son prescriptivos- cada docente busca las mejores estrategias para que cada alumno pueda aprender. Hoy en día esta tarea es difícil porque los chicos están con tantas estimulaciones fuera de la escuela que los alejan un poco o bastante de la exigencia que el establecimiento representa para ellos” expresó la Inspectora de Educación.
La Profesora Zaffora anticipó que “estamos comenzando la segunda mitad del año, los informes de calificación que las escuelas nos envían –las planillas semáforos de cada escuela y de cada alumno-, allí están de color verde las calificaciones de 7 a 10, con amarillo las notas que van de 4 a 6; y de color rojo las calificaciones de 0 a 3. Es una inmensa alegría ver todo verde y muy poco amarillo. Sabemos que el esfuerzo para esto es grande para todos. Aquí también está el resultado de familias y adultos que acompañan fuera de la escuela”.
Agregó a estas consideraciones la importancia de la relación entre la escuela y la familia: “cuando lo vincular que tiene cada alumno les dice lo mismo que sostiene la escuela eso se nota muchísimo. Cuando el adulto acompaña a la escuela en el mismo recorrido, cuando están al lado del establecimiento, las probabilidades de éxito son mayores. Es importante que los chicos vean que hay un solo discurso, un solo mensaje. Cuando esto sucede dentro del aula se nota, y se nota mucho”.
Finalmente la Inspectora Marcela Zaffora abordó una problemática que se ha hecho presente en mayor medida en los últimos años: la gran movilidad de los adolescentes y jóvenes que se cambian de una escuela a otra, lo que dificulta su sentido de pertenencia y la transforma en una permanente recomenzar para él y sus nuevos directivos y docentes en cada establecimiento, retrasando su trayectoria escolar.