La cafetería que habilitó Josi de Lusarreta en el jardín de la casona familiar, transformada en petit hotel desde hace unos años, es un cálido lugar, bien íntimo, para degustar un riquísimo café expreso en cualquier hora del día, al calor de los rayos de sol que se cuelan a través de los vidrios.
La estructura totalmente vidriada es bien moderna, pero conjuga a la perfección con el estilo arquitectónico de la casona.
Las rejas que separan la cafetería de la vereda brindan la suficiente lejanía de la circulación del tránsito de la ciudad que discurre por la Avenida Alsina, pero la distancia justa como para poder “espiar” a través del vidrio, mientras se disfruta de la intimidad del lugar, decorado con mesas y sillas recicladas en colores bien cálidos, conjugando lo antiguo con la vanguardia.
El lugar está inundado de un estimulante aroma a café. La dueña del Café de la Casa Hotel Boutique explica que “es un café muy especial. Se trata de café Nespresso, muy promocionado en el mundo entero. Tiene un sistema donde la cafetera trabaja con cápsulas que vienen herméticamente cerradas, por lo que el café está siempre fresco, sin perder aroma ni sabor. La cápsula entra en una ranura de la máquina, donde se perfora mecánicamente y de allí se produce la infusión”.
Con su estilo cordial Josi nos cuenta que “hay distintos tipos de café: expreso liviano, expreso fuerte, ristretto, otro café de origen de la India, entre otros. La máquina opera con un agua especial que proporciona Nestlé. Donde la máquina se ensucia lo más mínimo se prende una luz que va indicando que debe limpiarse o corregirse algún error de operación”.
No sólo se trata de disfrutar del café y de la compañía o la soledad que uno quiera. Ya están en proyecto de la propietaria diferentes propuestas para los concurrentes del lugar.
En el mes de septiembre habrá una degustación de té a cargo de una experta en el tema. Se prepara una actividad literaria, filosófica, de fotografía y otras propuestas artísticas.
Y para el verano está previsto que las mesas se correrán hacia el jardín para disfrutar en el medio de la ciudad de un coqueto espacio verde mientras se degustan picadas y tragos especiales.
Este singular punto de encuentro para los suarenses está abierto durante todo el día, en horario corrido entre las 8:30 y las 20:30 horas.