En la mañana del jueves los trabajadores de los microemprendimientos administrados por IAM y FCA, donde uno de los responsables de los talleres es Guillermo Videla, después de casi una semana de lucha llegaron al centro de nuestra ciudad desde el Pueblo Santa Maria para manifestarse frente a la Municipalidad de Coronel Suárez y acceder al Concejo Deliberante, que se encontraba reunido en sesión ordinaria.
Cuando llegaron al Palacio Municipal la reunión ya había concluido, pero no obstante leyeron un manifiesto que fue escuchado por algunos de los Concejales que se desconcentraban, donde solicitaban la intervención del poder político local ante la situación de inseguridad e inestabilidad que presenta la línea de producción que se gestó en el salón Juan Peters del Pueblo Santa Maria con el apoyo del COPRODESU, quien financió la puesta en marcha de los talleres que ejecutan tareas tercerizadas para la fabrica Vulcabrás.
Una de las trabajadoras, Rocío Ullman, fue la que alzó su voz para la lectura del manifiesto, mientras que fue respaldada ampliamente por la Delegada del gremio UTICRA en Coronel Suárez, Mariela Holzmann, quien volvió a reclamar una definición sobre una fuente de trabajo que tiene a sus operarios “sin respaldo, sin cobrar, sin una seguridad a futuro”, según expresó la mencionada dirigente gremial.
Estuvieron presentes respaldando la movilización de los trabajadores otros referentes de sindicatos locales, como Rubén Allende, quien además encabeza la CGT Regional Coronel Suárez, solidarizándose con la situación que los trabajadores radicados en el Pueblo Santa Maria desde hace casi una semana vienen sosteniendo.
Mas tarde, a las 11 hs., se llevó a cabo una nueva audiencia de conciliación en la sede de la Delegación Regional del Ministerio de Trabajo, donde las partes volvieron a exponer las causas del conflicto, mientras que previamente, en declaraciones a la prensa, tanto Ullman como Holzmann coincidieron en calificar de “mas de lo mismo” las apreciaciones publicas que Guillermo Videla esgrimió en las ultimas horas a modo de pretexto sobre la situación del microemprendimiento, pero lo concreto es que el dinero para afrontar los compromisos salariales no aparece y hoy por hoy las operarias, algunas de las cuales son madres solteras, viven un clima de incertidumbre insostenible.