La Nueva Radio Suárez habló con el Dr. Fernando Migliavaca, Médico Especialista en Cuidados Paliativos.
Dijo que en estos momentos “se está completando la firma de lo que se dio en llamar ‘Carta de Praga’, que es una solicitud que se hace desde los Cuidados Paliativos a todos los gobiernos del mundo para que vean la posibilidad de proveer a toda la población de estos cuidados. Es lo que falta para promulgarlo como uno más de todos los derechos humanos”.
“Aquí en Coronel Suárez por suerte estamos trabajando muchísimo, cada vez con mayor cantidad de pacientes, a partir de las derivaciones que realizan los colegas”.
Agregó que “las personas vienen a consultar y también son derivados, lo que indica que hay cada vez mayor concientización del uso de esta especialidad. Los cuidados paliativos no son solamente para los pacientes que están cercanos a la muerte, sino también para los pacientes crónicos que tienen patologías a lo largo de muchos años”.
Consultado sobre las terapias del tratamiento del dolor dijo que “los opiáceos, principalmente los derivados de la morfina, son la principal herramienta que tenemos; la morfina es el mejor analgésico que existe. Hay una serie de mitos en relación a su utilización, entre ellos que la morfina se da en los últimos días del ciclo de la vida, por lo que el paciente sufría dolor durante mucho tiempo y le echaban la culpa a la morfina de la proximidad de la muerte, cosa totalmente errónea. Hoy en pediatría, por dar un ejemplo, se usa en algunas patologías”.
El Dr. Migliavaca consideró que “otro de los mitos es que produce adicción cuando es usada con fines de medicamento, nada más alejado de esto. Tomemos en cuenta que quien tiene adicción a alguna sustancia es porque la misma le produce cierto bienestar; en el caso del dolor no es una sensación de bienestar sino una llegada a la normalidad”.
El Especialista en Cuidados Paliativos concluyó expresando que “de esa manera se fue comprobando que los medicamentos no producen adicción cuando corresponden a un tratamiento del dolor. Por otra parte, la morfina usada como analgésico no tiene prácticamente contraindicaciones, como pasa en el caso de la aspirina, por eso cada vez se usa más la morfina y nos los analgésico estiroideos que son los que habitualmente se utilizaban para el dolor”.