Pero los años han pasado y son los mismos estudiantes y docentes quienes alertan por una flaccidez en el cumplimiento de la norma y reclaman por que haya controles efectivos para su acatamiento y por la salud de todos.
Consultado el Jefe de Inspectores, Carlos Romero, dijo, entre otras cosas, que el personal es insuficiente para todo lo que tiene que atender el área, que suma tránsito, limpieza de terrenos, algunas cuestiones inherentes a la nocturnidad, entre otras problemáticas comunes de la ciudad que requieren contralor”.
El funcionario municipal consideró que “no puedo entrar a los locales nocturnos para ver solamente lo referido al consumo de cigarrillos en lugares cerrados e ignorar otras cosas, como por ejemplo el que haya menores de edad en los boliches, que se despachen bebidas alcohólicas, que no se respeten las normas de higiene. Por eso anticipo que si voy a meter a los Inspectores en el interior de los locales nocturnos lo voy a hacer por todo. Voy a entrar a controlar todo lo que corresponde”, agregó enfáticamente.
El funcionario también anticipó que no se están haciendo en estos momentos controles de tránsito con las multas respectivas porque faltan los talonarios de boletas para labrar las infracciones.