Imprimir Página | Volver a página de inicio

En el Hospital Municipal dejó de funcionar el respirador de la mesa de anestesia.

Hasta que el Ministerio de Salud envíe un nuevo equipamiento las operaciones se derivarán a la Clínica.

Se denomina mesa, máquina, aparato o equipo de anestesia al conjunto de elementos que sirven para administrar los gases medicinales y anestésicos al paciente durante la anestesia, tanto en ventilación espontánea como controlada.
Se trata de un equipo imprescindible en las salas de cirugía. En el Hospital de Coronel Suárez, que cuenta con dos quirófanos, hay (o había mejor dicho) una sola mesa de anestesia, ya que la otra se había mandado a reparar hace un tiempo.
El anestesista anterior, el Dr. Talledo, ya en el año 2011 había advertido de la necesidad de adquirir una nueva mesa de anestesia o solicitarla al organismo competente a nivel nacional, porque debía preverse la circunstancia que la que estaba en servicio podía dejar de funcionar o registrar algún tipo de inconveniente. En el mes de junio o julio del año pasado, 2012, el mismo profesional reiteró la solicitud y expresó su preocupación sobre el particular ante las autoridades del Hospital y de la Secretaría de Salud.
Finalmente, hace unos pocos días atrás, pasó lo que se venía anticipando: la mesa de anestesia dejó de funcionar, concretamente el respirador, que es uno de los implementos que la conforman, por lo que no se pueden hacer anestesias generales en el Hospital Municipal de Coronel Suárez y se resolvió no atender cirugías hasta tanto no se solucione este inconveniente, es decir, la decisión de los profesionales que concurren al quirófano es la lógica, porque no cuentan con el implemento básico, imprescindible, para poder hacer frente a una intervención quirúrgica.
Reunidos la tarde del miércoles los cirujanos, traumatólogos y obstetras –que son quienes utilizan el quirófano- resolvieron no realizar cirugías, derivar las mismas a la Clínica. Se habían registrado en los últimos días algunos procedimientos que no requerían anestesia general, sino la anestesia peridural o raquídea, pero esto se transforma en una riesgo, porque puede surgir un imprevisto, cualquier inconveniente en el medio de una cirugía de este tipo que derive en la necesidad de una anestesia general sin tener el equipamiento.
Las autoridades del Hospital Municipal y de la Secretaría de Salud informaron que el día miércoles hicieron las gestiones ante las autoridades del Ministerio de Salud, solicitando el aporte del equipamiento que dejó de funcionar.
Un Hospital Municipal que es orgullo no solamente para los suarenses, sino en la región, que ha servido también para hacer bandera en muchas campañas políticas, está mostrando evidentes signos de deterioro que resultan, cuando menos, preocupantes y que encienden constantes señales de alerta. Estos hechos que van surgiendo y salen a la luz pública confirman que tienen razón en lo que advierten los trabajadores del lugar (médicos, enfermeros, mucamas y otros profesionales) en cuanto al deterioro del servicio por políticas inadecuadas o la inexistencia de políticas desde la Secretaría de Salud y la administración del Hospital.