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Tenía conocimiento de la existencia de Olivera y su predominio sobre Sonia Marisol.
La mujer en un principio se vio conmovida por la predica de Jesús Olivera.
Hasta que finalmente su hijo le expresó que había que sacarlo del medio, “porque evidentemente era un chanta, un charlatán”.

Desde el martes por la tarde Mónica, sus hijos y otros familiares llegaron desde Río Colorado a la ciudad de Coronel Suárez después que la Policía local les notificara sobre la dolorosa situación que su hija había vivido y por la cual se encontraba internada en el Hospital Municipal de nuestra ciudad.
Desde que se comprobó su presencia en Coronel Suárez fue virtualmente asediada por los medios periodísticos, quienes no cesaron de indagar sobre su conocimiento referido a la relación de la victima con el depravado sujeto llamado Jesús Olivera.
Mónica señaló reiteradamente que por ahora lo único que le preocupa es el estado de salud de su hija, no quiso hablar sobre su nieta; pero en cambio un hijo, que también se presentó ante las cámaras de los canales capitalinos, reconoció que Sonia, su madre y otra hermana habían comenzado a mantener reuniones con Olivera, quien se hacia llamar Pastor de una Iglesia Evangélica y que tenia como misión trabajar por los chicos con carencias y abandonados en la calle.
Mónica y otra hermana fueron convencidas por el varón que debían concluir la vinculación religiosa con Olivera, “porque estaba demostrado por sus actitudes que era verdaderamente un charlatán”, expresó ante la consulta de los periodistas.
Sonia no pudo eludir la relación con Olivera, dijo no desconocer si se registró una historia amorosa pero si que a partir de allí se inició un calvario que incluyó que la victima se quedara sin un peso, “vendió la casa, los muebles, la ropa, se quedó a cero”, dijo el hermano.
“Mamá y mi otra hermana se liberaron pero Sonia estaba enceguecida”.
“Desde febrero que nos resultaba imposible saber de su paradero, recibíamos algunos mensajes de texto y algunos llamados, fuimos a la Policía pero la Justicia es muy lenta y ahora solo pido una justa sanción y quienes fueron autores de este aberrante hecho contra mi hija paguen como corresponde” dijo Mónica, con la ansiedad lógica de estar cerca de su hija en momentos en que supera los problemas de salud.