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Por Amelia Rodríguez de Huanguelén.
Agradecimientos.
“Orar unidos es un mandamiento para recuperar los valores, el respeto a la cultura del trabajo, el respeto al prójimo, a los mayores y tantas cosas más”.

Después de ocho meses y medio de aquel nefasto 11 de febrero en Mar de Plata en que me arrebataron la cartera, ayer obtuve el tan esperado ALTA médica.
Como consecuencia de ese momento tuve una fractura de clavícula y un hematoma subdural del cual fui operada a los pocos días.
Hoy al retomar una vida normal, sin medicación ni contraindicaciones, quiero dar Gracias…
Gracias a Dios por estar con vida…
Gracias a mis hijos y nueras que velaron por mi salud y no nos dejaron solos…
Gracias a mis amigos que mostraron su preocupación. Algunos fueron a verme a Mar del Plata o se comunicaron por distintos medios…
Gracias a los medios de comunicación que respetaron mi silencio durante el período de recuperación…
Gracias al Neurocirujano Dr. Ricardo Cragnaz de la Clínica 25 de Mayo de Mar del Plata, quien me atendió y operó; y a mi amigo y vecino Dr. Alfredo Miriuka, el que me contuvo y siguió la evolución del tratamiento…
Gracias a Nelson que sobrellevó el susto de su vida, sin haber estado un minuto ausente, rezando y sufriendo a la mi par…
Gracias a mi nieto Sebastián, el médico, que al verme inconsciente y con la cara destrozada se hizo cargo de la situación ante la tardanza de la ambulancia y la gravedad de mi estado evitando un desenlace peor…
Y por último gracias al motochorro por haberme dejado con vida y para él mi pregunta ¿Cuánto tiempo te duró lo que me robaste? Seguramente nada y ni te acordarás cómo fue el episodio. Pero te juro que no te odio por el sufrimiento que me causaste porque ni siquiera te vi. No te odio porque vos no naciste carterista.
La sociedad, el entorno, tu debilidad, te hicieron ladrón. Fallamos todos: la familia, la escuela, la sociedad, los programas políticos…
A mí me queda el recuerdo, sin secuelas mentales ni físicas. Pero tengo un miedo atroz. ¿Sabés lo que es sentir miedo? Claro que sí que tendrás miedo, porque en cada hecho delictivo vos también te arriesgas.
Por eso rezo por vos y por todos los que actúan como vos, porque están enfermos por la misma sociedad y por la cultura que nos infunden.
Orar unidos es un mandamiento para recuperar los valores, el respeto a la cultura del trabajo, el respeto al prójimo, a los mayores y tantas cosas más.
A todos les reitero mi agradecimiento y decirles que desde hoy retomo mi trabajo comunitario.
Con todo afecto Amelia Rodríguez de François - DNI 02.738.077.