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Después de las 10 horas por Villegas, frente a la Plazoleta Yapeyú.
Accidente y saturación vehicular en todo el trayecto entre la Cooperativa Obrera y el espacio público.
Policía, junto al personal del Hospital, entre la atención de un herido en un accidente y el complicado transito.
Todos quieren mirar en un sector que se transforma en un verdadero laberinto.

Pasaban las 10 de la mañana cuando por razones que se tratan de establecer una moto y un automóvil Volkswagen Fox color negro protagonizaron uno de los tantos accidentes de transito, donde el ciclista presentaba golpes en sus piernas, se lo veía absolutamente conciente, porque hasta discutía las razones de la colisión, y mientras llegaba la Policía y la ambulancia del Hospital Municipal el transito incesante a esa hora de la mañana del sábado en pocos instantes transformó el sector en un verdadero caos, sin control y peligrando inclusive la integridad del lesionado, que se encontraba tirado en la calle casi al borde del cordón de la Plazoleta Yapeyú, mientras la gente se acercaba a mirar y algunos hasta tuvieron que cortar el paso de los coches mientras rápidamente llegaron los uniformados para poner orden.
El motociclista sufrió golpes y posiblemente alguna lesión menor o fractura, por lo que el personal del Hospital, enfermero y chofer, adoptaron todas las prevenciones del caso hasta asegurarse el normal traslado del paciente hasta la Guardia del Hospital Municipal, donde se encontraba siendo atendido en la mañana de este sábado mientras los efectivos policiales registraban datos personales de quienes se vieron involucrados en este episodio que convocó a una gran cantidad de curiosos, a los que se sumaron las complicaciones del transito en un área de la ciudad que de por si es caótico, vienen vehículos, camiones y camionetas inclusive de la Avenida Casey, de Villegas, la gente cruza mal por falta de una adecuada demarcación o resguardo para los peatones, a lo que debe sumarse lo estrecho para circular por diferentes vías.
Casi un laberinto y con el agravante de un accidente con un herido que permaneció algunos minutos sobre el pavimento con los pies prácticamente a pocos centímetros de los coches que pasaban observando el panorama.
Afortunadamente el personal Policial y del Hospital actuó con toda premura y experiencia en estas emergencias en plena vía pública hasta que el paciente fue introducido en la ambulancia.
En fin, complicaciones rutinarias de Coronel Suárez, con el agravante de un accidente que por suerte no arrojó mayores complicaciones, pero si es demostrativo de los imponderables que presenta una ciudad donde su crecimiento trae aparejado situaciones traumáticas que aun restan resolver.