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Se colmó totalmente la hotelería, pubs, salas de eventos y los amigos celebraron la fecha.
Un festejo que se agiganta cada año y que habrá de continuar durante todo este fin de semana.
Una recorrida por la noche suarense.

Con cámara en mano, y en el afán de encontrar la mayor cantidad de amigos posibles, los enviados del Diario Digital de La Nueva Radio Suárez salieron en la búsqueda de retratar aquellas imágenes que simbolicen de alguna manera el Día Internacional del Amigo.
Como todos los años, en la noche del viernes los restaurantes de la ciudad estaban repletos de gente, con reservas agotadas con anticipación durante toda la semana; se repitieron las cenas, los brindis, los encuentros y también los reencuentros, donde aquellas amistades que han sellado este lazo lo afirman cada 20 de julio de una manera muy especial.
La noche del viernes comenzó temprano, con todos los locales y las mesas ocupadas, se acentuó avanzada la madrugada en pubs, locales bailables, salones de eventos y todos con el mismo criterio de compartir una celebración que en la Republica Argentina crece año tras año.
Durante el día se repitieron los mensajes de texto, los llamados telefónicos, los encuentros informales y los más claros augurios de encontrar palabras justas para expresar tanta gratitud por la amistad.
Coronel Suárez es una ciudad progresista, con actividades constantes, con un centro comercial a la altura de las grandes ciudades y en ese marco resulta un placer avanzar en el recorrido y encontrar gente de todas las edades siguiendo el mismo propósito de celebrar la amistad.
Origen de la celebración.
El creador de esta fiesta fue el profesor, músico y odontólogo argentino Enrique Febbraro, después que los astronautas Neil Amstrong, Edwin Buzz Aldrin y Michael Collins llegaran a la luna un 20 de julio de 1969. Pare este amigo argentino, por encima de la epopeya científica, el alunizaje debía ser también una manera de hacer nuevos amigos en otras partes de nuestro planeta. "Ese día -explicó Febbraro-, todos estuvimos pendientes de la suerte de los tres astronautas. Fuimos sus amigos y ellos, amigos del universo".
Antiguo vecino de la ciudad argentina de Lomas de Zamora -partido bonaerense que en mérito a su iniciativa y por decreto municipal, es la Capital Provincial de la Amistad- fundó allí también la Asociación Mundial para el Entendimiento. Fue también profesor de Psicología de la Universidad de la Fundación Carlo Cossimo Borromeo (Italia), y obtuvo el doctorado honoris causa en Ciencias Sociales en 1950, por la Academia Americana de la Historia y la Ciencia. Poco a poco fue logrando su cometido, primero fue el Superior Gobierno de la Provincia de Buenos Aires que con su decreto N: 235/79 autorizó la celebración y le dio un marco legal. Luego se fueron sumando distintas entidades y extendiéndose por toda la Argentina y por algunos países de América Latina.
¿Cómo se hace un amigo? ¿Dónde se lo encuentra? El profesor comentaba que en cualquier parte: en el bar, en la oficina, en otra ciudad, en aquel país, a la vuelta de la esquina, a través de Internet, viajando, entre los animales y las plantas, o en el mundo de las ideas. Sólo hace falta alguna disposición a amar, a escuchar, a comprender, a abrirse al otro, a dar, a sentir placer de compartir su dicha y de acompañarlo en su pena.
¿Cómo se conoce al amigo? "Es fácil, porque no se lo ve, se lo siente", decía nuestro amigo Febbraro. También apuntó que "Mi amigo es mi maestro, mi discípulo y mi condiscípulo. El me enseña, yo le enseño.