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Un refugio cuando las tardes soleadas del invierno facilitan la presencia masiva de las familias en las vacaciones de invierno.
La calesita, los botes y los avioncitos a full.

Teniendo en cuenta las dos semanas de vacaciones de invierno y la escasez de propuestas novedosas para los niños, y cuando el sol de la tarde lo permite, es admirable la cantidad de familias que convoca a diario la hermosa Plaza Tambor de Tacuarí que Coronel Suárez tiene y que perdura a través del tiempo como uno de los atractivos que hace a la felicidad de los más chicos.
Miércoles y jueves con temperaturas que superaron los 15 grados y un sol calido, casi sin viento, fue la situación ideal que hizo posible que mamá, papá y los abuelos utilicen muy bien las horas de estas vacaciones de invierno para que los chicos gastaran energías y disfrutaran a pleno todas las posibilidades de diversión que este espacio libre nos propone a todos los suarenses.
Mate en mano, facturas y hasta alguna que otra mascota fueron de la partida y la calesita, los botes y los avioncitos estuvieron disputados pero bajo la atenta mirada del personal municipal.
Estos juegos hicieron posible que por lo menos el aire libre y la jornada agradable permitieran que la familia comparta con los más chicos esta plaza que para los suarenses siempre ha sido emblemática y que evidentemente en muy pocas ciudades se encuentran atracciones mecánicas con un marco natural gratuitamente.
Por suerte Coronel Suárez tiene la plaza, porque la verdad que en estas vacaciones invernales no hubo mucha generación de ideas y propuestas acordes con la temporada.