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Habló de la brecha intergeneracional, las nuevas formas de comunicación, y la necesidad de tomar el camino del amor y del respeto para recomponer los vínculos entre adultos y jóvenes.
Organizo la Fundación Osde con los auspicios del Concejo Deliberante.

En una forma absolutamente clara, con palabras profundamente reflexionadas que fueron pintando la realidad de jóvenes y adultos, y la relación entre ambos, la filosofa de amplio prestigio en nuestro país y en el exterior, Josefina Semillán, habló sobre las relaciones, el vínculo intergeneracional, y las nuevas tecnologías entre otros temas.
Convocada por la Fundación OSDE, en una charla organizada de manera conjunta con el Concejo Deliberante de Coronel Suárez, la filósofa habló ante una sala de deliberaciones totalmente colmada.
Previamente desarrolló una conferencia de prensa ante los medios de la ciudad.
“Hay que enmarcar esto de nuevos jóvenes. El mundo es un ente en evolución constante, por lo tanto, cada generación no es igual a la otra, a pesar que en algunos momentos esas diferencias se hacen más expresas o abismales. Es cierto que una base importante de los cambios en los jóvenes contemporáneos tiene que ver con el acceso a las nuevas tecnologías. Yo por mi parte, desde un planteo filosófico, sencillo y entendible, puedo decir que hay dos cuestiones básicas de las que no se hablan, pero que es el lugar del que nacen o donde se producen todas las demás: cambios de conducta, valores, libertades. Se trata de la experiencia del espacio y del tiempo, que puede parecer teórica y es lo más concreto que hay. Todo el tiempo estamos preguntando ¿A dónde vas?, ¿cuándo volvés?, de dónde venís? Señalo en rueda de prensa la Licenciada Semillan.
Luego agrego “Estas son referencias espacio temporales. Ninguna experiencia humana ocurre sin estas dos referencias. La pregunta sería porqué se producen estas nuevas experiencias, estos cambios? Y la respuesta sin duda es por las nuevas tecnologías que derraman luego a todos los niveles. Para que se entienda mejor: es espacio al que los adultos estamos acostumbrados es el que narró la historia, con pasado, presente y futuro. Un devenir que iba de atrás hacia adelante y que cubría esas etapas. El hecho es que en las tecnologías contemporáneas el tiempo es simultáneo: por supuesto que existe pasado, presente y futuro, pero podemos llegar a todo el universo al mismo tiempo o con diferencias mínimas en forma simultánea, incluso hoy en forma económicamente accesible. Esta conexión con el mundo es simultánea y universal y global. Nosotros los adultos, fuimos teniendo instrumentos para interpretar la realidad en un proceso que se daba en la escuela y se llamaba alfabetización. En este proceso íbamos uniendo elementos simples para pasar a otros más complejos y compuestos: la letra con la sílaba, la silaba con la palabra, ésta con la oración; íbamos de izquierda a derecha y si algo salía mal, revisábamos el conjunto. La atención nos fue formada así, por eso somos buenos en análisis en crítica, en revisión, en fundamentación” expreso la profesional.
Josefina Semillan recalco luego que “En cambio, los niños que están en aparatos de televisión desde que nacen, percibiendo imágenes, lo que es un todo, que contiene en sí múltiples elementos (luces, elementos, íconos). Algo atrae la atención, y en el caso de las nuevas tecnologías, el joven lo que hace es cliquear aquello que le interesa, no hace un análisis pormenorizado de la pantalla; eso lo hace un adulto Los niños son apolíticos, cliquean con certeza digital, no con análisis racional; con intuición virtual; es diferencia que estoy marcando con el adulto es que su espacio simultáneo y su tiempo es del del ya y el ahora. Nosotros somos de espacios sucesivos y de tiempo evolutivo:: si me equivoco reveo. Esto ha dado lugar a su escasa resistencia a la frustración: ya se tiene que dar la puerta. Para los jóvenes la dimensión del tiempo y el espacio es el aquí y el ahora. Si uno le dice “pensá en tus acciones, revisá tus posibilidades futuras” es un mensaje que no entra. A los padres y docentes les está costando la relación con este sujeto yasístico, que siente que el futuro es hoy, donde el principio del placer está en el instante”.
Consultada en como lograr relación con estos nuevos jóvenes, destacó la necesidad primero de entender que estos jóvenes de ahora son hijos de la época. “Debemos por un lado ser humilde todos y reconocer, entre otras cosas que todos, no solamente los jóvenes, estamos teniendo dificultades para la relación cara a cara. Estamos todos con muchas dificultades en los vínculos, porque vamos de pantalla en pantalla, sin tomarnos tiempo para mirar los rostros de los otros. Pero como adultos no debemos claudicar nunca, porque si no nos ponemos como los niños de hoy, pasamos a ser sujetos gánicos”. Finalmente y ante la requisitoria de los medios agrego que “Hay que tomar en cuenta que la medida del amor tiene que ver con la búsqueda de estrategias diferentes porque cuando uno ama busca el encuentro. Hay que saber también que la crisis del adulto es haber sustituído el amor por la compra de objetos, entonces cuando desde pequeñitos se calma el berrinche o se hace uno adorable porque compra, gasta, y da lo que se quiere y no pone límites, es abominable, porque lo dejó carente de uno de los más ricos aprendizajes en la vida: el valor del no y el sí. Para que haya un sí profundo tiene que haber un no fundado, no uno arbitrario. Creo que si hoy hay sujetos gánicos, es porque ha habido adultos que hemos quebrado lo que hemos dicho como teoría y recomendación con lo que hemos visto vivir. Si uno quiere que alguien cambio, no es ni el discurso, ni las buenas razones, ni la brillantez de la retórica lo que convence. Lo que convence es ver vivir” concluyó la Filosofa Josefina Semillan Dartiguelongue en conferencia de prensa en el Concejo Deliberante previo a la charla publica y acompañada del Presidente del organismo Ernesto Palenzona, el Concejal Guillermo Sol y autoridades de la Fundación Osde promotores de su presencia en nuestro medio.