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Un llamado telefónico ayer por la mañana advirtió, a través del contestador de la Radio, lo que pasaba como consecuencia de la lluvia y de no prever los desagües en el conjunto habitacional del Federal II en el Barrio Rosario.
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El agua que precipitó desde el mediodía del martes hasta bien entrada la noche produjo sus consecuencias. Las calles aparecieron anegadas y en varios sectores con cortes, ya que el agua llegaba de una cuneta a otra.
El miércoles por la mañana se podía observar como el agua permanecía estancada, sin correr hacia ningún lado. Y los patios de las viviendas, en algunos casos, se transformaron en enormes piletones, donde el líquido va a desaparecer cuando logre filtrar hacia abajo, cuando las napas bajen su nivel.
Ayer a media mañana el Secretario de Gobierno de la Municipalidad, Gustavo Di Battista, en compañía de otros funcionarios de la Comuna, recorría las calles del barrio comprobando la situación.
Las fotos son prueba elocuente del estado en que se encontraba el lugar después de la lluvia.