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“Los Coros de la Roca” es como la conciencia de la Iglesia en el Mundo”
Comenzó con el interrogante sobre si ¿es la humanidad quien ha abandonado a la Iglesia ¿ o ¿es la Iglesia quien ha abandonado a la Humanidad?.
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En la noche del sábado se ofreció en la sala del Mercado Municipal de las Artes una teatralizacion del conjunto de poemas “Coros de la Roca” que se encuentra en el libro de poesía de Thomas Eliot para lo cual la introducción estuvo a cargo del Cura Párroco Diego Kessler sintetizando la interesante propuesta que convoco a numeroso publico que se acerco al edificio de Brandsen y Lamadrid.
Para ello se presento una expresiva escenografia, la proyección de videos apropiados acompañando el conmovedor relato y el sonido requerido para apreciar esta presentación teatral que se condice con este tiempo de Cuaresma que estamos transcurriendo donde varios integrantes de la comunidad parroquial fueron los lectores de cada uno de los tres capítulos en que se divide la obra que permitió la reflexión de cada una de las acciones de cada individuo en la actualidad, antes y durante todas las épocas.
Indicamos para este período – como instrumento para superar la fractura entre saber y creer, señalada por Carrón en los Ejercicios Espirituales de la Fraternidad 2010 - la lectura del conjunto de poemas "Coros de la Roca" que se encuentra en el libro Poesía de T. S. Eliot, que Don Giussani definió como "la conciencia de la Iglesia en el mundo moderno".
Sintéticamente, los “Coros de la Roca” fueron leídos como una secuencia compuesta de tres momentos comenzando con el Coro en el cual la posición de la Iglesia se contrapone a la posición de un mundo que no la desea más.
Los cristianos en la segunda secuencia tienen que buscar resistir y vivir, caminar, luchar en este mundo que no los desea, pero con toda la conciencia de sus fallas, de sus defectos, de los pesos que hay que cargar, que son pesos suyos y pesos heredados.
Sin embargo en el tramo de la conclusión es la cuestión más grave es que ellos mismos, la propia Iglesia, los mismos cristianos se ven investidos por el escepticismo y por el materialismo del mundo entero, de toda la sociedad
La Iglesia que es siempre La Roca pero que también es la Extranjera, en toda la historia Roca y Extranjera. Cuando Eliot introduce la Iglesia en escena en la obra aclama:
¡Silencio! Y mantened distancia reverente
Ya que percibo acercarse
La Roca. La que tal vez responderá a nuestras dudas.
La Roca. La Centinela. La Extranjera.
La que vio todo desde el principio.
Y ahora ve todo lo que todavía está por suceder.
El testigo. El que juzga y sentencia. La Extranjera.
La que fue tocada por Dios, en el que toda la verdad es innata.
Este relato sintetizado fue expuesto con toda sincronización por los interpretes, que por momentos le impusieron la emoción o trascendencia del texto reforzado por el correspondiente clima impuesto por luz, sonido y ambientación.