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Propuestas para la distinción Yvonne Trilla de Leschot.
“Vemos en esta nominación el reflejo del trabajo de todas las enfermeras”.
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Las Licenciadas en Enfermería Alicia Gerk, Ana Inés Schwindt, y Mónica Morales están propuestas también (como Zulma Cobeaga, Marisa Schneider, Marta Freitas y la Dra. María Inés Garralda) para la distinción “Premio Ivonne Trilla de Leschot” a la mujer del año en la salud.
En un alto que hicieron en la mañana de ayer en la tarea diaria que desarrollan en el Hospital Municipal de Coronel Suárez, hablaron con La Nueva Radio Suárez en torno a lo que significa estar nominadas para este galardón y lo que implica la elección por vocación de esta profesión.
“Sentimos que el estar designadas para obtener este premio implica sobre todas las cosas el reconocimiento a nuestra profesión, por la que tanto luchamos en forma diaria. Cada día trabajamos por ser mejores, le ponemos el alma y el corazón a toda nuestra labor. Que estas nominaciones la estemos compartiendo entre todas la verdad es que es un orgullo muy grande para la enfermería de Coronel Suárez y para nosotros particularmente, que trabajamos en la educación y en el desarrollo de esta profesión que es tan necesaria para la comunidad de nuestro Distrito”.
“La enfermera para poder exigir, para poder reclamar algo, tenemos que demostrar y solamente a través de la educación, de la capacitación permanente, es como estamos manifestando a la comunidad y a nuestros propios compañeros que podemos ser buenos profesionales, con toda la humanidad que requiere la tarea diaria. Hay que hacer muy bien las cosas, en nuestra profesión es imposible hacer algo a medias”.
“Vemos en esta nominación el reflejo del trabajo de todas las enfermeras, no solamente de un grupo. Nos parece que esto implica sobre todo el reconocimiento a la enfermería. Cuando nos vamos de nuestras casas nos olvidamos prácticamente de nuestras familias para entregarnos totalmente hacia quienes nos necesitan”-
Relataron las tres enfermeras consultadas lo que implica para ellas mismas la pérdida de un paciente: “lloramos y también rezamos por ellos; los duelos son muy difíciles de superar, somos humanos, somos madres, hermanas, hijas y esto hace que la pérdida de los otros también nos duelan como propias. Por eso muchas veces encontramos consuelo en la oración y en seguir trabajando en pos de la salud de los otros pacientes que nos necesitan”.