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Rindes de 2.000 a 2.300 en Pasman.
En el resto del Partido entre 3.000 y 3.500 kilos.
Nuevamente el trigo demuestra lo que aguanta y lo que da en una zona triguera por excelencia.
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La Nueva Radio Suárez habló con Sergio Gaitán, a cargo de la Sección Cereales de la Cooperativa San Martín, quien en torno a los números finales dijo que “la cosecha anduvo bien, tanto en cebada como en trigo, dependiendo de las distintas zonas y de la cantidad de agua que le llegó a los sembrados” expresó nuestro entrevistado.
Gaitán confirmó que “hubo rindes de 2.000, 2.300 kilos en Pasman; en el resto de la zona de 3.000, 3.500 kilos. Hay que estar conformes, pensando que tuvimos un régimen de lluvias que fue escaso, restringido en los meses de septiembre y octubre. Nuevamente el trigo demuestra lo que aguanta y lo que da; somos una zona triguera por excelencia”.
“Lamentablemente estamos trabados con otra situación, que si bien se están empezando a conocer negocios de trigo, el problema radica en el valor. Antes de este feriado largo teníamos valores de 130, 125 dólares la tonelada; 135 dólares febrero y 140 dólares marzo. Esto quiere decir que la gente si quiere puede vender ahora pero en esos valores va a cobrar en febrero o en marzo, sin fecha específica. Los productores lo que necesitan ahora es el dinero en este mes de enero porque hay un montón de costos que deben enfrentar. Por supuesto que puede venderlo en enero y cobrarlo más o menos rápido, pero lo está vendiendo a un precio muy bajo, que comparado a los 210, 220 dólares de la campaña anterior hay una notable diferencia”.
“Por supuesto que el trigo ha bajado a nivel internacional: lo que antes en Chicago se pagaba 300 dólares hoy se está abonando 220, 230 dólares, pero hay que tomar en cuenta que en nuestro país el Gobierno se queda con 50, 55 dólares por tonelada, por el sistema de retención, que hace que al final, al pagar toda la carga de deuda y de obligaciones impositivas, al productor le quede muy poco”.
Sergio Gaitán habló también de las dificultades de almacenamiento: “nuestra Cooperativa tiene una capacidad de 75.000 toneladas y estamos teniendo problemas para guardar el cereal, porque lo que se vendió en septiembre, octubre del año pasado, todavía no se ha podido enviar a puerto, porque no aparecen los certificados de comercialización y se están logrando con muchas restricciones y de manera muy lenta”.
Dijo que todas estas acciones parecen conducir hacia el monocultivo de soja, cuando el productor en nuestra zona no se puede permitir pasar por alto la siembra de granos finos.