Uno de los realizadores de esta película, con carácter de documental y que ha recibido numerosos premios nacionales e internacionales, estuvo en Coronel Suárez en el día de ayer, cuando se produjeron proyecciones del film en tres horarios distintos.
Se trata de Pabló Hernán Zubizarreta, que habló con La Nueva Radio Suárez, sobre su película.
La misma está basada también en la investigación del periodista Eduardo Kimel, y trata del asesinato de dos seminaristas y tres Sacerdotes pertenecientes a una congregación de origen irlandesa en la Iglesia de San Patricio, ubicada en el barrio de Belgrano, en Capital Federal.
“El día 2 de julio, los montoneros habían colocado una bomba, que dio como resultado la muerte de varios efectivos de la Policía. Las exequias de los muertos en ese hecho se produjeron el día 3, y extrañamente ese día por la noche y madrugada del día siguiente, en varios lugares de Capital Federal se produjeron hechos llamativos, de crímenes, que no respondían a las características de la forma de operar de los grupos militares”.
“Durante muchos años, un reducido grupo de vecinos de Belgrano, se reunieron en la esquina de la Iglesia –en el interior del templo no lo podían hacer porque la Congregación se los había prohibido- pidiendo la investigación, el esclarecimiento y la justicia por este hecho aberrante.
“Años después se hizo una investigación judicial, y la justicia no llegó por las leyes de punto final y obediencia debida”.
“En nuestro país no hay registro audiovisual de este hecho. Solamente escuetas crónicas policiales en los diarios de la época. Pero logramos obtener una filmación en 16 milímetros, en Estados Unidos, que es la crónica de la masacre. Y un mes antes de terminar la edición de la película y cuando habíamos hecho una proyección de una versión preliminar, nos llegaron los contactos para poder acceder al expediente judicial. Pudimos durante media hora ver el expediente y tomar algunas fotografías del mismo. Lo que se sabe por el expediente judicial, por testimonios, es que el asesinato lo cometió un grupo de tareas de la ESMA”.