Esto es lo que dice Celia Schwab, quien tiene ahora 66 años, y se casó cuando tenía 16 con Horacio Schell, quien cuenta a la fecha con 72 años.
Por su parte, Horacio asiente lo que dice su mujer, se ríe, y agrega que hay que trabajar mucho para llevar el pan a la casa y también para sostener un matrimonio a lo largo de todo este tiempo.
Celia habla hasta por los codos, Horacio bastante menos, Celia dice que su marido es bastante testarudo. Horacio tiene un rostro bondadoso y una mirada serena, donde es posible descubrir que por más terquedad que tenga cuenta con un corazón noble capaz de dar a la larga la razón a quien la tenía.
Así han vivido 50 años juntos y siguen disfrutando de los que estén por venir y la salud disponga.
Se ven jóvenes, alegres, manifestando los dos a la par que “hemos pasado años muy buenos, al casarnos jóvenes disfrutamos de los hijos y ahora lo estamos haciendo con los nietos”.
Son un ejemplo de vida en común. Que cuando se quiere de verdad, se puede.