Mejor que nadie los saben los docentes y los alumnos que por momentos tienen que compartir en un área de circulación, las clases de computación con las de educación física.
Además, como la escuela es de jornada completa, tiene una matrícula creciente, y una demanda que debe rechazarse, debido a que no hay espacio físico para albergar a tantos alumnos.
Por eso fue recibida con algarabía, la presencia de los albañiles y la apertura de los cimientos que se produjo en estos últimos días delineando lo que será la dirección nueva, dos aulas, y la secretaría u oficina para profesores.
Queda pendiente el proyecto futuro de cerrar el sector de patio que tiene piso, para transformarlo en un salón de usos múltiples, espacio imprescindible cuando llegan los días fríos del invierno, y es necesario desarrollar actividades en espacios cubiertos..