“Hay quienes desde hace años toman clases de gimnasia de diferentes tipos, sin abandonar invierno y verano, y tienen un conducta que es digna de destacar en cuanto al cuidado de su cuerpo y preocupación por mantenerse sanos y en forma. Pero también hay quienes vienen en verano, porque no pueden en otro momento del año por imposibilidad horaria, y porque les cuesta mantener la constancia.
La experiencia de Miriam Bonifacino, le permite asegurar que “Hay que tomar en cuenta que no se trata solamente de un cuidado estético del cuerpo, ya que se sabe que la actividad física libera endorfinas, esto genera un buen estado de ánimo y mejora la situación de estrés que vive la gente”.
Miriam ofrece en su gimnasio ubicado en la calle Avellaneda una amplia variedad de gimnasia como step, localizada, etc, las que son dictadas en diferentes horarios, y también una enorme diversidad de aparatos, que se ubican en diferentes niveles y que permiten que hasta 10 o más personas estén utilizándolos en forma simultánea.