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La orden que existe es incorporar los veterinarios privados al movimiento de las fundaciones.
“Muchas entidades de este tipo se han convertido casi en potencias económicas”.
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Consultamos al Dr. Gustavo Cerri, a cargo de la oficina local del SENASA, sobre los cambios que se introdujeron en la reglamentación para el control de la aftosa.
“Se trata sobre todo de un cambio operacional porque la orden que existe es incorporar los veterinarios privados al movimiento de las fundaciones que en los Distritos se formaron para el control de la fiebre aftosa” informó el Dr. Cerri.
Expresó que “la incorporación esta prevista como vendedores de vacuna o como vacunadores. Por supuesto que la responsable de conservar la cadena de frío, promocionar las campañas y ver que se lleven adelante siguen siendo las fundaciones formadas a este efecto. En Coronel Suárez no vamos a tener inconvenientes de ningún tipo, porque después del 2001 en FUNSUSA, la Fundación de Coronel Suárez, incorporamos a todos los veterinarios. No pasa lo mismo en fundaciones vecinas, como por ejemplo Carhué, Pigué, Bahía Blanca, que no tienen los veterinarios formando parte de su staff, lo que les va a significar un cambio en la operatorio, porque van a tener que permitirle a los veterinarios privados que comercialicen la vacuna y se incorporen al registro de vacunadores”.
El Medico Veterinario consultado concluyó señalando que “hay que tomar en cuenta que muchas entidades de este tipo se han convertido casi en potencias económicas y uno se pregunta si es ético, ya que las fundaciones, como su nombre lo indica, son sin fines de lucro”.