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“Cada vez hay mayor conciencia sobre la importancia de donar órganos, pero es necesaria aún más, porque son muchos los pacientes que esperan por un transplante”.
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La Nueva Radio Suárez consultó al Médico Nefrólogo Dr. Carlos Alberdi sobre la donación de órganos, la espera de quienes aguardan la generosidad de otros en el medio del dolor y la importancia de crear cada vez mayor conciencia sobre el particular.
“Recuerdo que en el año 1996, cuando en la ciudad se produjo la primera ablación múltiple, los padres decidieron hacer la donación de los órganos de su hija porque ella había manifestado su voluntad de que así sea en caso de que algo le sucediera. Es por ello que es tan importante tener hablado el tema. Pero evidentemente, las personas se concientizan mucho más sobre esto si tienen alguien cercano con una problemática que requiere de un transplante, como es el caso, por ejemplo, de los pacientes que deben dializarse hasta tres veces por semana porque sus riñones no les funcionan”.
Dijo que “con el correr de los años esta situación ha mejorado. Nosotros lo vemos continuamente porque tenemos cada vez más operativos de transplante. Cuando nos avisan que un paciente que tenemos en diálisis, aún cuando esté en cuarto o quinto lugar de una lista, si hay una donación compatible, preparamos a la persona y viaja inmediatamente a La Plata. Esto nos pasó dos veces el año pasado, con dos pacientes jóvenes de la localidad de Huanguelén, quienes después, desafortunadamente, no fueron receptores de los riñones, que se destinaron a otras personas que estaban más arriba en la lista y también eran compatibles”.
Apuntó que en estos casos siempre se cuenta con la colaboración de la Municipalidad, que dispone de ambulancia –en los casos necesarios- o de un vehículo con chofer para llevar inmediatamente al paciente hacia el centro de transplante.
“Es verdad que hay mayor conciencia, sobre todo en las generaciones jóvenes. Pero si tomamos en cuenta las personas que mueren todos los días en diferentes circunstancias, la verdad es que tendría que haber muchos más donantes. Esto haría posible cambiar la vida de muchas personas enfermas que están esperando un transplante”.