“El negocio, tal como lo conocimos los últimos 10 años, ha cambiado. Hoy, guardar la soja en un silo bolsa no tiene sentido con precios estables y un dólar tranquilo. Hay que rotar el capital, aprovechar la tasa de interés de mercado y ser más astuto en el desarrollo del negocio”.
La afirmación corresponde al economista Salvador Di Stéfano, en agroeducacion.com, quien sostuvo, asimismo, que el productor necesita reinventarse y armar nuevos planes de negocios para una realidad económica más enfocada en lo financiero y en lo comercial.
“Tranqueras adentro los productores son Maradona y Messi juntos, (pero) hay que mejorar tranqueras afuera y escalar los negocios en forma horizontal o vertical. Explorar asociaciones y así llegar a la góndola”, amplió.
También dijo que el sector agropecuario necesita ideas innovadoras del gobierno, con reducción de impuestos, metas de exportación y demás.
Respecto de 2017, Di Stéfano dijo que el flujo de dólares que llegará al país mantendrá el tipo de cambio planchado.
“El blanqueo de dinero líquido fue de U$S 7.000 millones y debe estar inmovilizado por 6 meses. El dinero en el exterior aportaría unos U$S 50.000 millones de base imponible y una multa de unos U$S 5.000 millones y, en marzo, ingresa la multa del blanqueo de propiedades, y los rezagados de depósitos en el exterior, pagando una multa el 15%”, añadió.
También explicó que en mayo se liberan los U$S 7.000 millones depositados por el blanqueo, como los dólares de la cosecha de soja y de maíz.
“En este escenario tenemos un dólar planchado hasta junio. Y recién en el segundo semestre lo vemos por encima de $ 18”, afirmó.
“Es decir, el dólar no ayudará al negocio de la agricultura, sino que será funcional al negocio de agregado de valor. Con un dólar planchado, el consumo de carne, leche y otros derivados del campo deberían tener una mejor performance”, aseguró.
En cuanto a los cereales, el economista aseguró que el trigo dejo excelentes resultados, con rendimientos extraordinarios y precios muy buenos en el mercado de futuro, ya que se puede vender a julio a un valor de $ 3.000 la tonelada.
“El valor surge de vender el futuro de trigo en el Matba, y asegurar un precio del dólar a igual mes en el Rofex. Sin tener estrategia para vender a futuro, los rendimientos serán magros. Por eso hay que implementar estos mecanismos urgentes”, calculó.
Di Stéfano dijo que el maíz tiene precios a futuro más bajo que los actuales.
“Para quien esté en la cadena de agregado de valor, es un buen momento para asegurarse un precio futuro menor al actual. Hay que comprar maíz futuro abril, y asegurar el dólar abril, y así obtendremos un precio menor al actual y nos aseguraremos rentabilidad en el agregado de valor”, sugirió.
“La soja tiene todas las posibilidades de subir. En el mercado de futuro a julio coquetea con un valor de $ 4.800 la tonelada, que no es nada malo”, comentó.
Di Stéfano aseguró que para operar en el mercado de futuro es fundamental tener dinero para reponer garantía, a fin de que ello no sea un costo hundido comprar Lebac en pesos, que rinden el 24,75% anual a 35 días.
“Es una tasa positiva contra la inflación a futuro, y frente a un dólar que se devaluaría sólo el 20% en el año. Los negocios también son financieros”, comentó.
“Hay que tomar financiamiento de mercado. Hay créditos en dólares a tasas de un dígito, que ofrecen financiamiento al 5% anual, pero debemos sumarle la devaluación esperada para 2017. Desde nuestro punto de vista, la devaluación esperada es del 20% anual. Esto no daría un costo del 25% en pesos. Si los bancos nos ofrecen créditos en pesos por debajo del 25% anual, despreciamos la financiación en dólares”, consideró.
Respecto la carne vacuna, Di Stéfano dijo que hay que trabajar para poder exportar carne vacuna.
“Brasil y Paraguay, con retención de vientres y revaluación de moneda, están mostrando precios de carne en gancho en dólares a la suba. Es buen momento para que el Gobierno haga políticas activas para mejorar los precios de exportación. Sugerimos eliminar el IVA, ya que permite ajustar balances por inflación; esto nos haría más competitivo”, afirmó.
También comentó que en carne vacuna, pollo y cerdo hay que llegar a góndola, ya que de lo contrario las rentabilidades serán escasas. “El gobierno debería trabajar activamente en desarrollar el mercado de futuros de los tres productos”, añadió.
“La leche comenzó a subir. En el mercado interno tenemos un mercado saturado y todo depende de la exportación. También en trabajar en productos nuevos para exportar, como la leche para bebés”, relató.
Fuente: La Nueva.