Una consulta obligada en este tiempo es la marcha de la cosecha de miel, considerando que la apícola es una actividad productiva muy importante en nuestra zona.
Pero la pregunta se topa con una incontrastable realidad: los incendios en la zona de La Pampa y el sudoeste bonaerense, lugares donde muchos productores apícolas llevan sus colmenas, en la búsqueda de buenas cosechas de miel.
Consultado Tony Duckwen, productor apícola, indicó que “estos no están siendo buenos días para los productores que están al sur de la Provincia de Buenos Aires y La Pampa”, aclarando en este sentido que “no se tiene la dimensión de lo que está pasando. El incendio comprende miles de hectáreas que se están quemando desde La Adela, donde termina la Provincia de La Pampa hasta que comienza la Provincia de Río Negro, y el fuego ya está llegando cerca de Médanos y toda esa zona. El ancho del fuego llega hasta 30 o 50 kms., el frente de fuego, quiere decir que se están quemando arriba de 300 mil hectáreas y es la zona donde justo están la mayoría de los productores apícolas de Coronel Suárez”.
Preguntado si muchos han perdido sus colmenas respondió que “no sé si muchos, todavía no se conocen bien los datos, porque no se ha podido todavía hacer una evaluación de eso. Pero sí sabemos de productores que han tenido pérdidas. Lo mayor que hemos conocido alrededor de 200 colmenas por productor, después 50, 30, 20, 80. Algunos las han podido sacar, lo hicieron a cualquier hora del día. Esto de los que conocemos, hay que tomar en cuenta también los que no conocemos o con los que no estamos en contacto. Las rutas están cortadas, solo se deja circular a algunos productores agropecuarios, a algunos productores apícolas los dejaron entrar, con la condición que se cuiden y que logren salvar lo que puedan. La situación es lamentable, tanto para los productores apícolas y mucho peor para los productores agropecuarios que han perdido todo: no quedó alambre, no quedó nada, casas, mangas, corrales. Yo antes de anoche entré a un campo donde todavía tenía colmenas que me quedaban y realmente el espectáculo es dantesco, como si fuera una de esas películas en las que se muestra que no queda nada en el Planeta Tierra. Así de terrorífico se veía. Fuego por todos lados, no había nada que no esté quemado”.
En este contexto la expectativa por la cosecha de miel que está transitando ha decaído, porque ya se sabe que será una producción “magra”, según calificó Tony Duckwen.