“Estamos llegando a fin de año, cansados pero muy contentos por la cantidad de cosas lindas, positivas, que ocurrieron este año”, dijo el Profesor Ángel Schamberger, Director de la Escuela de Música y coordinador de la Orquesta Escuela.
Analizó que “la Escuela pudo salir a la comunidad, compartir lo que hacemos aquí dentro, que es música, desde un montón de lugares y un montón de formas diferentes”.
En relación a la Orquesta Escuela, que corresponde a un programa provincial que funciona dentro de la Escuela Municipal de Música, dijo que no hubo inconvenientes para la continuidad de este programa a pesar del cambio de gobierno.
“En un momento de este año se produjo la presencia de responsables del equipo técnico del programa a nivel provincial, en el marco de una recorrida que hicieron por toda la región, compartiendo una jornada de trabajo con nosotros. Creo que cada vez más se van entendiendo en el país que esto es importante, como otras cosas a las que se le dan prioridad. La música, brindada de esta manera, es algo muy importante y se va entendiendo”.
La Escuela de Música este año ha intensificado el trabajo con grupos corales de Coronel Suárez y la región, prueba de ello es el último concierto navideño que tuvo lugar en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen.
En este sentido recordó que “tuvimos un trabajo muy importante con los coros, la Orquesta Escuela junto al Coro de Niños y Jóvenes, dirigido por Olga Pérez, dimos tres conciertos, dos a mitad de año y uno para público en general. Fue una experiencia muy linda, porque la conjunción de las voces y los instrumentos es algo muy lindo. También con el Coro de Mayores, que dirige Blanca Long, el Coral de Puan y el de Pigüé, Artimusa; fue una experiencia muy interesante, donde pudimos presentar una obra que es muy bonita, muy conocida, la Navidad Nuestra. Para el Bicentenario tuvimos una actividad junto a la Banda y los dos coros de Coronel Suárez, donde interpretamos una suite argentina. No es sencillo interactuar con otras instituciones, por horarios, metodologías de trabajo y demás, pero hubo muy buena voluntad de parte de todo el mundo y se logró el resultado esperado”.
Este es el octavo año de funcionamiento de la Escuela de Música y su Director siente que ha crecido “desde un montón de lugares”.
Y explica: “desde lo sonoro se puede apreciar el nivel alcanzado. Antes sonaba todo muy suavecito, bastante desafinado. Ahora ha mejorado muchísimo la afinación y la sonoridad. Eso en cuanto a lo técnico”.
El Profesor Schamberger señala además que “pudimos este año encarar obras originales, normalmente se tocan arreglos, versiones simplificadas de obras; este año pudimos encarar obras originales, tal cual como fue concebida por el compositor. Eso desde lo técnico para nosotros es un paso enorme. Desde hace dos meses venimos tocando casi todos los días, con actividades todos los fines de semana, con los cierres por cátedras, tuvimos el festejo del Día de la Música. El jueves pasado fue la muestra de bajo y batería y decidimos hacerlo fuera de la Escuela, cortando la calle, por una cuestión de espacio, pero para salir también hacia la comunidad. Se hizo el concierto de estos instrumentos y ahí también se pudo ver el crecimiento de la Escuela, en cuanto a la calidad musical y a la variedad. Desde una baterista mayor, una abuela, hasta un niño pequeñito, todos tocando con un buen resultado sonoro. Lo que se ve y lo que se escucha es muy gratificante para todos”.
Durante el verano la actividad continúa, con talleres varios a ciclo cerrado.
Y por supuesto que la alegría para todos los integrantes de la Escuela de Música fue mayúscula hace unos días atrás, cuando el Intendente les entregó simbólicamente las llaves de lo que será el año próximo la nueva sede de la institución, en calle Lamadrid, al lado del Mercado de las Artes.
Ya se piensa en hacer una conexión, ya que los patios están lindantes con el Mercado, lugar donde muchas veces la Escuela de Música realiza conciertos.