La Nueva Radio Suárez ha dialogado en dos o tres oportunidades con Graciela Schmidt Robilotta.
Es una mujer muy joven, a quien tempranamente le detectaron tumores en el cuerpo que, además de obligarla a enfrentar diferentes tratamientos para el cáncer, le cercenaron la posibilidad de ser madre.
Del dolor sacó fortalezas y no solamente transformó en bellos y profundos poemas todo lo que le pasaba, todas las vivencias que iba teniendo y publicó un primer libro, “Ofrendas”, sino que muchas veces consoló, tomó de las manos a quien sufría, dio fuerzas, multiplicó esperanzas en personas que también tenían la enfermedad.
Hace unos meses tuvo que hacer frente a otra dura prueba, una que nunca se había esperado: su compañero de 28 años, Sergio Pita, fue diagnosticado con un muy grave tipo de leucemia, que le provocó la muerte en apenas un corto tiempo.
Este martes fue el Día Mundial del Cáncer, la jornada fue muy triste, muy dolorosa para Graciela, y no obstante se predispuso a hablar. En el medio del proceso de duelo más fuerte al que ha tenido que hacer frente saca la cuenta que “perdí todo: mis padres, los hijos que nunca tuve y mi compañero de toda la vida. Y no obstante, en el medio de tanto dolor, no puedo dejar de reconocer que habiendo perdido todo ahora solamente me queda ganar, todo lo que pueda venir de ahora en más será ganancia, va a sumar a mi vida”.
Dentro del más agobiante dolor, recién iniciado un proceso de duelo que nunca esperó frente a todos los que ya había pasado, igual, el mensaje de esperanza, para sí y para quien quiera escucharlo.