En el transcurso de esta semana un vecino de nuestra ciudad, debidamente identificado con nombre, apellido y número de documento, dejó grabado en el contestador automático de la Radio una queja vecinal donde se indicaba un acopio de agroquímicos y agroinsumos en calle Euzkadi al 233 y que causaba una serie de inconvenientes.
Mario Munch, de él se trata, este viernes visitó la Radio y fue detallando paso a paso todo lo sucedido.
“El acopio de referencia que ha motivado múltiples acciones esta ubicado en calle Euzkadi 233, donde existen agroinsumos del rubro insecticidas, herbicidas, como el glifosato y algunos otros mas, destinados a la cadena agropecuaria”, expresó Munch.
Luego agregó que “mas allá que esté el galpón con los insumos en su interior, el acopio temporario se hace en la vía publica, hasta tanto lo ubican en el interior, cuestión que la pude constatar a través de fotografías al momento de hacer la descarga”.
“Esta modalidad de descargas causan un sinfín de inconvenientes en la misma calle, ya sea por el camión maniobrando, por la misma descarga o la ubicación de estos elementos; hubo derrames de insecticidas, de semillas de maíz curadas con agroquímicos, entre otras cosas”.
Munch luego comentó en los estudios de La Nueva Radio Suárez que “aquí lo que desencadenó todo esto fue que el martes nuevamente el camión estaba descargando agroinsumos, yo tomo una serie de fotografías, se acerca el transportista y me dice: no me saques fotos al camión porque se donde vivís, vas a tener problemas y te voy a matar”.
“No segui hablando con él, llamé a su empresa, le informé este inconveniente con este camionero y además fui a radicar la denuncia en la Fiscalía, ya que las fotos fueron sacadas en la vía publica”.
“Además de esto fui a Bromatología, hablé con el Secretario de Medio Ambiente del Municipio, fui a la oficina del Ministerio de Asuntos Agrarios para saber si este galpón de acopio estaba inscripto como corresponde, cuestión que no sucedía, no estaba registrado, tampoco en el Municipio, o sea que estuvimos tres años con un acopio clandestino de elementos sumamente peligrosos para la salud de la población”, agregó.
Munch expresó, luego de que se hiciera la denuncia publica y los planteos ante los organismos competentes, que “por ahora mi problema estará solucionado, ya que el Municipio, a través de Bromatología, como este acopio no estaba registrado, procedió a la clausura, aunque la pregunta que me hago es ¿qué sucederá con este y el resto de los acopios que están dentro de la ciudad?, incluso alguno a metros de una plaza donde juegan los niños; ¿quién es el responsable?, ¿quién controla?, ¿qué sucede si hubiese un incendio o explosión?, ¿estaremos preparados? Bueno, en realidad son un montón de interrogantes que surgen y por esto esta denuncia publica a través de la Radio”, dijo Mario Munch, además de hacer otras varias consideraciones con respecto a este tema.
A partir de este tema surgen interrogantes para una cuestión muy delicada para la salud.
¿Están autorizados estos acopios en la zona urbana?
¿Hay alguna ley al respecto?
¿Si la hubiese, por qué no se aplica?
¿Quién habilita estos lugares donde se puede apreciar a simple vista estos agroinsumos?
¿Por qué muchas veces se los descarga en la vía publica y luego se acopian dentro de los galpones?
¿Qué sucedería si se registrase un incendio o explosión de estas sustancias toxicas, las cuales causan enormes inconvenientes para la salud?
¿Hay elementos en el Cuartel de Bomberos para combatir este tipo de incendios?
Se aguardan respuestas.