En la tarde del lunes pasado, ingresar al Mercado Municipal de las Artes, era encontrarse con diferentes espacios donde la creación y los talentos surgidos de los alumnos de la Profesora Verónica Kenig, de todas las edades, con estilos diferentes, pensamientos y realidades distintas se amalgamaron para extremar todos sus recaudos creativos y dejando volar la imaginación, sacaron lo mejor de si y ello quedó en evidencia en la gigantesca muestra 2013 que se inauguró en la oportunidad.
Los box del mercados ocupados con grabados y pinturas que se extendían hasta la sala bicentenario del histórico edificio de Lamadrid y Brandsen, instalaciones, objetos experimentales, los famosos atrapasueños que pendientes de diferentes lugares del hall central del mercado, llamaban la atención y definían que cada uno de los objetos que se utilizaron para su diseño tenia que ver con los alumnos pertenecientes a diversas generaciones, cada obra tenia que ver con su personalidad, situaciones que marcaron diversas épocas, todo fue útil para crear y experimentar, pero en la seguridad que cada objeto se relaciona con esos sentires, pesares, ansiedades, felicidades que cada uno puede llevar consigo.
Recorrer esta muestra era sorprenderse a cada paso y en consecuencia demostraba el intenso trabajo que no solo se puso de manifiesto en el acto de crear sino en la organización, distribución y presentación de cada una de las técnicas que se utilizaron para la oportunidad, todo lo cual se generó en el famoso “Taller de la calle Brown” a cargo de la Profesora Verónica Kenig quien hizo una introducción para determinar lo que estaba a la vista del numerosos público que colmó el Mercado.
Obras pertenecientes a los alumnos infantiles, adolescentes y adultos, donde se pudo apreciar una instalación que abarcaba diferentes sectores del edificio cultural ya que en el taller además de producir todo lo que tiene que ver con el gusto e inclinación artística de cada concurrente se trabaja sobre la idea de que es lo que quiere manifestar con cada obra, cada trazo, logrando trabajos inéditos, como los atrapasueños que fueron toda una novedad, con su correspondiente explicación.
Para ello la Profesora Vernica Kenig invitó primeramente a sus alumnas de diferentes edades, todas adultos, del grupo Magenta expuso sobre como fue el desarrollo de cada instalación.
Dos alumnas explicaron no solo las técnicas utilizadas, sino también el significado de crear, desarrollar potencialidades que a veces están guardadas en lo más íntimo de cada uno.
Tras esa presentación acompañaron los músicos Juan Rúfula, Rubén Benitez y Juan Pablo Lodos del grupo Barbasonicos quienes utilizando su buena onda y humor, ambientaron con diferentes temas la inauguración de la muestra a la que invitamos muy especialmente al público que la recorra, se detenga en cada lugar de exposición y aprecie el alto nivel de creatividad, donde el Taller de la calle Brown, nos abre las puertas para aprender, investigar, profundizar conocimientos y lo mas importante permitirle a cada uno desarrollar esos talentos que a veces cuesta sacarlos del interior y terminan transformándose en una obra de arte, donde cada autor, es capaz de manifestarse utilizando diversos recursos, algunos en grupos, otros manteniendo la individualidad, significando lo que estaba sintiendo, lo que podía desde el interior, lo que tiene que ver con su historia de vida y así sucesivamente, en libertad dejando volar la imaginación.
El resultado quedóexpuesto a la vida de los sorprendidos espectadores con una muestra sorprendente, variada, colorida y hasta divertida, todo lo cual es fruto importante del mecanismos utilizado por Verónica, su perfección, su calidez y su presencia que invita a generar todas estas demostraciones.
Numeroso público, la presencia de las autoridades del Instituto Cultural Municipal y una buena sensación del excelente momento que las artes plásticas están viviendo en la ciudad de Coronel Suárez en los últimos tiempos.